Recientemente hemos visto las dos caras de Taylor Swift. Por un lado se ha erigido como la defensora de los artistas enviando una carta a Apple indicando que quieren explotarles ofreciendo durante tres meses su música a través del nuevo servicio en streaming similar a Spotify, Apple Music, sin pagar un solo dólar a los artistas. Apple ha tenido que rectificar en este sentido y sí que terminará pagando a éstos.

Su carta se titulaba Para Apple con Amor. En esta carta, de carácter público, la artista anunciaba que su quinto disco, 1989, no estaría disponible en el servicio de música en streaming Apple Music. Alegaba que esta música iba a estar disponible en los tres primeros meses que Apple ofrece a los usuarios para que prueben el servicio totalmente gratis, cosa que ella entiende como explotación a los artistas, que tampoco iban a cobrar un dólar en este sentido, ya que cobrarán por algo más del 70% de las suscripciones que realicen los usuarios de pago.

Su carta se titulaba Para Apple con Amor. En esta carta, de carácter público, la artista anunciaba que su quinto disco, 1989, no estaría disponible en el servicio de música en streaming Apple Music

Después de este gesto a favor de los artistas de la cantante luchando por los derechos de los mismos, Jason Sheldon, fotógrafo musical y de conciertos, ha destapado también públicamente que Taylor Swift está actuando con un doble rasero, ya que asegura que le parece correcto por parte de la artista y la respuesta de Apple dando marcha atrás. Pero el fotógrafo ahora reclama por parte de la artista que critica con contundencia la no correcta retribución de los artistas, cosa que ella no hace con los fotógrafos en los conciertos.

Jason Sheldon ha publicado el contrato.